Las consecuencias de colaborar con empresas no licenciadas pueden ser devastadoras y van mucho más allá de las pérdidas financieras. El inversor arriesga no solo su dinero, sino también su reputación, su futuro y su libertad de movimiento. Es importante comprender todo el espectro de posibles problemas para evitar conscientemente ofertas dudosas.
La práctica mundial muestra que los gobiernos de los países que ofrecen ciudadanía por inversiones reaccionan de manera extremadamente estricta ante cualquier infracción. Las solicitudes presentadas a través de personas no autorizadas se rechazan de inmediato, y los datos del solicitante se transmiten a las autoridades policiales. Ahorrar en los servicios de un agente oficial es una ilusión que al final resulta incomparablemente más costosa.